Los tipos de convulsiones o crisis epilépticas se han clasificado tomando como referencia su origen en el cerebro, es decir, en función de la amplitud del grupo de neuronas que se irriten. De acuerdo al esquema implementado por la Liga Internacional contra la Epilepsia en 1981 y revisado posteriormente en el 2017, las convulsiones pueden englobarse en dos grandes grupos “Parciales o actualmente conocidas como Focales” , cuando la descarga comienza en una zona específica del cerebro y puede luego extenderse a toda la corteza cerebral, y las “Generalizadas” , cuando la descarga ocurre en toda la superficie del cerebro.
Dentro de esos dos grandes grupos existen sub-clasificaciones tanto para las crisis parciales como para las generalizadas. En el caso de las crisis parciales o focales la clasificación se relaciona al efecto de la crisis sobre el estado de conciencia, y en el caso de las crisis generalizadas la clasificación se basa en función de los efectos sobre el comportamiento.